Aquí os paso una receta muy fácil y rica, con ingredientes que casi siempre tenemos a mano y que se hace en un plis.
Necesitaremos:
(Ingredientes para dos personas)
1 lata de cerveza (Yo en mi caso cogí la que tenía: Victoria, malagueña y exquisita jejeje)
2 pechuguitas de pollo
1 yogur de limón (también vale natural, natural azucarado o uno griego) NO de otro sabor.
Tomillo
1 pastilla de caldo de pollo
Aceite de oliva
2 patatas medianas - grandes
Preparación:
Cortamos el pollo en trocitos medianos (uno 5 cm aprox), y los echamos a una cacerola con 4 cucharadas de aceite de oliva.
Cuando empiece a hacerse, echamos la pastilla de caldo entera desmenuzada y vamos removiendo.
En cuanto se vea "chisporrotear" y dorarse el pollo, añadimos el yogur de limón.
Removemos un poco.
Acto seguido echamos la cerveza y ponemos a fuego medio.
Controlad que no se salga la espuma porque al irse haciendo al principio ¡sube!, vigilad hasta que se consuma un poco. Ahora podemos echar el tomillo.
Y ya, se deja que vaya haciendo, removiendo y controlando, en cuanto se vea que está la salsita un poco cremosa se retira del fuego.
Mientras se hace el pollo, pelamos y cortamos las patatas en daditos. Y las freímos en abundante aceite de oliva.
Un minutillo antes de retirar del fuego el pollo, le echamos las patatas ya fritas para que cojan un poco de sabor de las salsa.
La idea no es que se pochen con el pollo, solo echarlas al final de la cocción y que cojan un poco de sabor pero sigan quedando crujientes ^_^
Resultado:
¡¡¡QUE APROVECHE!!!
Pepita